¿Buscas el mejor modelo para sustituir tu pasta térmica o montar tu PC a medida? En este artículo, exploraremos las mejores pastas térmicas disponibles, destacando sus características, rendimiento y relación calidad-precio.
¿Para qué sirve la pasta térmica?
La pasta térmica es una sustancia viscosa que se aplica entre el procesador (CPU) o la tarjeta gráfica (GPU) y el disipador de calor. Su función principal es rellenar las microimperfecciones entre estas superficies para garantizar una mejor transferencia de calor.
Incluso las superficies metálicas más lisas presentan irregularidades microscópicas que pueden impedir que el calor se disipe correctamente.
Mejora del rendimiento: una buena conducción del calor permite que el procesador y la tarjeta gráfica funcionen a temperaturas ideales, evitando caídas de rendimiento debidas al calor.
Mayor vida útil de los componentes: Al mantener una temperatura baja, la pasta térmica alarga la vida de los componentes, ya que un calor elevado continuo puede dañarlos.
Nuestra selección de las mejores pastas térmicas del mercado
1. Thermal Grizzly – Kryonaut: Descubra la excelencia térmica
Cada grado cuenta, y Kryonaut Thermal Grizzly está reconocida como una de las mejores pastas térmicas del mercado. Su excelente conductividad térmica la convierte en la elección preferida de los usuarios más exigentes, especialmente en áreas de alto rendimiento como los juegos o el renderizado de vídeo.
Puntos fuertes
- Conductividad térmica extrema
- No se seca
Puntos débiles
- Más caro que otros materiales
2. ARCTIC MX-4 pasta térmica asequible y de alto rendimiento
ARCTIC MX-4 es una opción asequible y de alto rendimiento en comparación con la pasta térmica Thermal Grizzly Kryonaut, lo que la convierte en una solución económica sin comprometer el rendimiento para aficionados y profesionales preocupados por el presupuesto.
Puntos fuertes
- Buena capacidad térmica
- Asequible
Puntos débiles
- Se seca con el tiempo
3. Pasta térmica duradera Noctua NT-H2
Noctua NT-H2 destaca por su composición de calidad y formulación diseñada para garantizar la estabilidad a largo plazo. Gracias a su textura no conductora y no corrosiva, ofrece una protección eficaz contra las altas temperaturas y las condiciones de funcionamiento, incluso en los entornos más exigentes.
Puntos fuertes del producto
- Pasta térmica duradera
- Asequible
Puntos débiles
- Menos eficiente que otros modelos
¿Cuánto dura la pasta térmica?
Para mantener una buena conducción térmica entre el procesador y el disipador, es aconsejable cambiar la pasta térmica cada 2 años, sobre todo si utiliza mucho el ordenador. Sin embargo, esto es sólo una estimación, ya que hay varios factores que influyen en la vida útil de la pasta térmica:
- El tipo de pasta
- La temperatura media del procesador
- Cómo se aplicó la pasta
- El compuesto utilizado
- La ventilación del PC: el sobrecalentamiento frecuente reduce la vida útil de la pasta
El mejor indicador para saber si es necesario cambiar la pasta térmica es la temperatura del procesador (CPU). En general, la CPU debería estar a unos 30°C en reposo y a unos 70°C cuando se utiliza.
Si el ordenador supera regularmente los 80°C, es hora de cambiar la pasta térmica.
Las almohadillas térmicas suelen utilizarse cuando hay que rellenar un gran hueco entre el componente y el disipador. También se prefieren por su facilidad de instalación y reutilización, a diferencia de la pasta térmica, que hay que cambiar cada vez que se aplica.
Para saber cómo elegir entre almohadilla térmica y pasta térmica, lea nuestro artículo completo aquí. Allí encontrará consejos para mejorar la gestión térmica y los costes asociados.